Mientras, en el Box de Blanquito (nuestro coche), le acoplaban un refuerzo en la parte frontal, para hacer frente a los golpes moderados contra piedras, baches y demás objetos que puedan sorprendernos en la carretera.
Esta mejora consta de soldar en los triángulos, (donde se apoya la barra anteriormente reforzada, ver entrada anterior) una pieza de chapa de 2mm de grosor, que evitará dentro de lo posible la inestabilidad y el deterioro delantero, que en definitiva es el que más sufrirá.
A la chapa se le aplica una imprimación (en spray) para evitar el contacto con los agentes externos.
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